Prólogo
El Minivoley es por definición un proceso pedagógico que incluye la adaptación de las reglas y las condiciones del juego a los niños para facilitar y permitir su aprendizaje. Por lo tanto aparece como un contrasentido el fijar normas y reglamentaciones estrictas para el mismo, atentos a su esencia.
Sin embargo valoramos también, que si bien la competición en Minivoley debe estar presidida por un carácter eminentemente pedagógico y formativo, es necesario que las reglas del juego sean claras y conocidas por todos, como una herramienta más de enseñanza a la cual deben someterse los participantes.
Categorías
Sub-11 y Sub-13
Los equipos de niños y niñas competirán por separado, respetando las edades en cada caso.
Comentario: Las denominaciones de las abarcan los dos grupos de edades que es recomendable compitan por separado, teniendo en consideración la evolución y maduración de las aptitudes psico-físicas.
La recomendación de competir niños y niñas por separado, está dirigida fundamentalmente a evitar y combatir el concepto bastante extendido en muchos sectores de la sociedad, que el voleibol es un deporte básicamente femenino, con el consecuente perjuicio que ello trae para captar niños para la actividad.
Cuando la escasez de equipos sea muy marcada, podrá organizarse competiciones mixtas en sus dos variantes: equipos mixtos o partidos entre equipos de niños y niñas.
El campo
Sub-11: 4,50 ancho x 9,00 de largo Sub-13: 6,00 ancho x 12,00 de largo
Dividido a lo largo en dos mitades iguales, delimitado por líneas de colores que contrasten con la superficie de juego.
La superficie del terreno será plana y sin desniveles que puedan resultar peligrosos para los participantes.
Comentario: Estas medidas abarcan una zona de juego adecuada para niños y niñas que posean una buena motricidad y dominio técnico.
En competiciones no oficiales, las medidas del campo pueden adecuarse a las aptitudes de los participantes, modificándolas si fuera necesario.
Se aceptan todo tipo de superficies de juego: cemento, madera, sintéticos, asfalto, hierba, etc. con la condición que no supongan un riesgo para los niños y niñas.